BREVE RESEÑA INFORMATIVA
------------------------------------
Está entre nosotros Jesús, María y José; La misma Sagrada Familia de Belén; el mismo Cristo, La misma Virgen María, El mismo Padre San José; La misma Santísima Trinidad, en definitiva: Padre, Hijo y Espíritu Santo; El Creador; El Todopoderoso; ¡DIOS!. Sí, Dios está entre la humanidad (siempre lo ha estado, dentro y fuera de nosotros); nos instruye para que logremos nuestra salvación integralmente.
Son muchísimas las manifestaciones que nos ha hecho Dios y nos sigue haciendo, siempre con el mismo y único propósito, para que logremos enmendar y perfeccionarnos.
Como podemos haber visto ya (en el link “CONSISTENCIA”) Jesús, María y José se ha manifestado y nos ha dejado esas sus manifestaciones para nuestro provecho. Una característica de estas manifestaciones es su sorprendente claridad de contenido (aunque factores ajenos a ellas no las hayan hecho parecer tan así que digamos).
Ya instaurada la Devoción y el inicio de la Obra de Jesús, María y José en Sarría (Caracas – Venezuela), la ordenanza tomo el carácter que desde un principio no había tomado. La ordenanza era, y es, llevarle al mundo entero la Devoción y propiciar que la humanidad, por su salvación, la ponga en práctica voluntaria pero infaliblemente. Los primeros años fueron, si se quiere, arrolladores, no obstante, con las dificultades de siempre, sumadas a las generadas por la intriga y la mala fe: es que mucha gente transpiraba fervor, entonces motor impulsor de la Obra Divina canalizada por Dolores. Aunque la Señora Dolores comenzó a oír la Voz de Dios en el año 1.934, la Devoción se iniciaría en Caracas, tentativamente, allá en el ocaso del año 1.937 ó en el transcurrir del año 1.938; muy pocos años pasaron y la Devoción, luego de ser superados múltiples escollos, ya en el génesis de la década de los años 40 (del siglo 20, claro está) empezó a extenderse por casi toda la nación. Con ese objetivo, con el de extender la Devoción (amén la construcción de la capilla de Sarría) fue constituida (por orden directa del mismo Jesús, María y José) una sociedad: LA “SOCIEDAD DE JESÚS, MARÍA Y JOSÉ”. Su misión suprema era (y es) Divulgar la Devoción de Jesús, María y José planetariamente e instaurarla; además de que sus miembros promuevan, con palabras y proceder, el mensaje y las enseñanzas teócratas que le constituyen. Tales motivadores hacen imposible no referir a la Sociedad y demandarle propósitos y resultados.
Hoy, el producto que más se ve son las Capillas. Hay varias Capillas de Jesús, María y José en algunos Estados de Venezuela; pero duele ver cómo son desaprovechadas: unas por poco no están abandonadas, mientras otras, derruidas moral y hasta físicamente, sí que lo están; ese es el producto mayor conseguido hasta nuestros días.
Veamos un registro de Capillas, en lo subsiguiente.
CAPILLAS DE JESÚS, MARÍA Y JOSÉ
EXISTENTES EN VENEZUELA | ||||
ESTADOS
|
CAPILLAS
|
CONDICIÓN
| ||
Caracas
Municipio Libertador |
Sede Principal (Sarría)
|
Activa (con limitaciones)
| ||
FILIALES
| ||||
Anzoátegui
|
Barcelona 1
|
Desconocida
| ||
Barcelona 2
|
Desconocida
| |||
Chuparín
|
Activa (con limitaciones)
| |||
Los Potocos
|
Desconocida
| |||
Puerto La Cruz
|
Inactiva
| |||
Tierra Adentro
|
Inactiva
| |||
Aragua
|
San Joaquín
|
Activa (algo)
| ||
Turmerito
|
Inactiva
| |||
Bolívar
|
Upata
|
Inactiva
| ||
Falcón
|
Churuguara
|
Desconocida
| ||
Lara
|
Agua Buena
|
Desconocida
| ||
Las Guabinas
|
Activa (con limitaciones)
| |||
Los Rastrojos
|
Inactiva
| |||
Rancho Verde
|
Desconocida
| |||
Sarare
|
Activa (con limitaciones)
| |||
Siquisique
|
Activa (con limitaciones)
| |||
Miranda
|
El Rodeo
|
Inactiva
| ||
Paracotos
|
Inactiva
| |||
Portuguesa
|
Araure
|
Inactiva
| ||
La Batalla
|
Desconocida
| |||
La Lucía
|
Desconocida
| |||
Las Caramas
|
Desconocida
| |||
Ospinos
|
Inactiva
| |||
Río Acarigua
|
Activa (con limitaciones)
| |||
Sucre
|
Cariaco
|
Desconocida
| ||
Yaracuy
|
Camunare
|
Desconocida
| ||
Cocorote
|
Activa (con limitaciones)
| |||
La Gotera
|
Inactiva
| |||
La Trilla
|
Inactiva
| |||
Sabana Larga
|
Inactiva
| |||
San Felipe
|
Activa (con limitaciones)
| |||
Sujeto a enmienda,
bajo constancia. |
NOTA: La condición reflejada, es la conocida por el escribiente hasta el año 2000
|
Hubo cuatro décadas fuertes, en lo que tiene que ver con la actividad pro divulgación de la Devoción, pero mucho más lo fueron las dos primeras (dado que estaba la señora Dolores): fueron las décadas de los años 40, 50, 60 y 70. El escribiente vivió la última década, casi en su totalidad, de la mano de muchos pioneros que departieron con la señora Dolores; eso dejó bastante conocimiento de los orígenes y aplicaciones devocionales, tanto como suficiente información relativa a esta noble causa (igual que de lo que la beneficia y de lo que no).
Así, independientemente de las condiciones, hay pruebas (silentes, es verdad, pero pruebas al fin) de la trayectoria que tiene en Venezuela esta Sagrada Devoción: La Devoción de Jesús, María y José. Aquí en Venezuela estamos los primeros encargados de difundir en el mundo entero esta Sagrada Devoción (aunque eso no significa que, si alguien está en otro país y posee suficiente conocimiento devocional, no tenga también el mismo deber de promoción)
Si entre quienes lean, alguien no ha escuchado nunca (o no recuerda) algo acerca de la Devoción (de Jesús, María y José), bueno: es deducible ya la razón.
Ahora me dirijo a mis hermanos de la Sociedad de Jesús, María y José; a todos, incluso a aquellos que bajo su voluntad están "conduciendo" la Sociedad a la cual sus normas el mismo Dios dejó dictaminadas.
Vaya el presente, expuesto públicamente, directo a todas las personas vinculadas claramente con la responsable y representante de la Obra por la cual nace el presente Blog: La Sociedad de Jesús, María y José.
Motivos personales, ninguno hay (que quede expreso desde el principio); son todos (los motivos) de carácter misional estrictamente. Reconózcase de antemano, que no hay persona más pecadora en la vida (ni con más errores) que la productora de estas letras; pero eso sí: La Obra que Jesús, María y José dejó para consumar es otra cosa; por muy pecador que se sea, no se puede soslayar su defensa.
Siendo que pertenecí a la Sociedad de Jesús, María y José (en la cual se fue mi juventud) siento en mi conciencia el deber de otorgarle información y participación respecto a la actividad que incursiono en este Blog; simple y llanamente. (Es libre de aceptar o rechazar)
HERMANOS…
Hace ya más de diez años de mi retiro de la Sociedad, ¡increíble! ¿verdad?; aunque no fue sino hasta el año 2005 que hice formal dicho retiro. ¿Que por qué me retiré?, simple: porque estoy plenamente en abierto desacuerdo con la manera como siempre ha sido regida la Sociedad; porque me espanté de lo que vi, de lo que oí, de lo que presencié y de lo que padecí en tantos años, y de la conclusión a la que mi reflexión me llevó. Mi retiro lo efectué mediante declaración escrita a tal efecto (“JURADA DECLARACIÓN”), la cual conservo, como constancia, firmada por quien entonces fungía como presidente de la Sociedad (eso porque él aún no ostentaba el cargo legalmente). Ese mismo año, y en la misma fecha, igualmente consigné los “FUNDAMENTOS DEVOCIONALES” (de lo cual también conservo constancia firmada); fue el producto de años de arduo trabajo en pro de la causa y de un plumazo fue todo rechazado (pero en cambio, sí tomaron algunas partes de mis diseños de imágenes para un sitio web (ya desaparecido, por cierto, dado que ahora no es gratis el servicio)). A pulso y con meticulosidad extrema mejoré lo siguiente: las doctrinas, la historia, el libro de oraciones... (entre otros diversos aspectos, el gramatical). Nada, de lo contemplado en los “FUNDAMENTOS DEVOCIONALES”, fue respetado; tampoco siquiera se me respondió para decirme, con argumentos lógicos asidos a bien sustentadas razones, por qué lo rechazaron y cuántas voces, de probada autoridad por conocimiento y trayectoria devocionales plenos, participaron en la revisión y en la toma de la decisión. No hay que ser muy sabio para entender que la decisión, más que decisión fue arbitrariedad. Que se acuerden los que lo saben; que se enteren los que lo ignoran; que se avoquen los interesados (de obra y no de bla, bla, blá) que más que miedo tengan conciencia. Si no hay interesados de obra, entonces que nadie se avoque y que todo se quede como está; de eso estoy 99% seguro: de que todo se quedará como está (pero por el lado de La Sociedad de Jesús, María y José (no por el mío)). Yo no me he retirado de La Devoción de Jesús, María y José; no me he retirado de la convicción más segura que tengo en la vida; no me he retirado de mi compromiso universal. No me retiraré jamás.
Abajo: JURADA DECLARACIÓN y FUNDAMENTOS DEVOCIONALES.
Evocar ciertas cosas al escribir, me afecta bastante; pero por lo demás, todo está excelente. Fueron unos cuantos los años que esperé, para que lleváramos a cabo acciones concretas, con miras a extender la Devoción y a ver encaminada la consolidación de la Obra; pero todo fue infructuoso, ustedes lo saben, y terminé retirándome en el naciente año 2000 que para la sociedad lucía prometedor. Yo, en silencio, solo, estoy haciendo cosas; en su momento lo irán sabiendo. Hoy, después de estos más de diez años, apenas, para efectos de divulgación masiva, estoy pudiendo publicar un blog en Internet; pero creo que no importa, quizá sea que este es el momento y no otro. ¿Saben? Tengo varios sitios Webs construidos para Jesús, María y José (disponibles para escoger uno a ser publicado); pero solo es muy difícil, porque no es publicarlo nada más sino atenderlo ¿para qué abrirlo si no lo puedo atender?; además, financieramente hablando, también cuesta; yo lo asumiré solo en su momento, porque así deberá ser cuando tenga que ser. No crean que no me duele estar solo, sí me duele; sabiendo y conociendo tanta gente de la Sociedad que sé que puede aportar por la causa (unos por talento y juventud; otros por la curtiembre de los años y el acervo de conocimientos que seguro ya se les durmió en la memoria), claro que me duele.
Cada vez que leo La Doctrina (mejorada, aunque a algunos no les guste) me asusto; me asusto porque veo más y más claro lo lejos que estamos de los dictámenes; veo más y más claro lo cerca que estamos del no retorno; veo cuán cerca está ya la carencia de tiempo para hacer lo que otrora no se hizo; veo igual, lo cada vez más fácil que se está haciendo mundalizarse. Nuevas generaciones siguen levantándose y, lo que debería serles populoso y de generalizado conocimiento, simplemente se lo estamos dejando en la arena de lo ignoto. Me da tristeza; me da… no sé, no sé explicar, no hay palabras para mí.
¿Saben, mis hermanos!: estoy como sintiendo que voy; siento que voy... no, no es la muerte que se llama, es la vida; siento que voy a la vida. Siento que voy a la vida; pero a una vida rota, a una vida rota porque me la dieron para que la reparara y no la reparé. Ese sentir no es simbólico, créanme, es literalmente así. No es que siento que voy a partir de este mundo ahorita o mañana, no; es que, desde hace años ya, empecé a experimentar la sensación del resultado: de qué es lo que nos resultará, en el plano extraterreno, de la producción o de la no producción (y de la producción nociva), que hayamos efectuado aquí en la tierra. Para completar tuve que pertenecer a La Sociedad de Jesús, María y José bajo sus “reglas” (lejanas de las preceptuadas por La Divinidad); tamaña responsabilidad asumí sin saberlo, se me derramó el tiempo y es ahora imposible de recoger.
No se lea nada de lo anterior como una ácida crítica; léase como una amarga demanda de mejoras (aunque envuelta en desesperanza). Al fijarme en la manera como “avanza” la humanidad, cada vez más ciega y oscurecida, no puedo evitar (y no lo debo evitar) pensar en Dios; al pensar en Dios, pienso en su ejemplo y en su palabra, cotejo todo con nuestras actuaciones y concluyo que estaremos muy mal si no cumplimos la misión que asumimos (ustedes lo saben). Qué bonito sería, qué dicha nos embargaría, si de pronto esta Obra capitalizara nuestras mejoras (que no las puede capitalizar porque simplemente no las hay) y se extendiera al mundo entero.
Lo que más me preocupa es que, cuando mira las cosas que hacemos, la gente de la humanidad no nos juzga a nosotros sino a Dios: dicen que Dios no existe, dicen que es mentira lo que les decimos que dice, dicen que todo es una farsa. Por todo eso mi enfoque va orientado a demostrar que no es lo mismo Dios que sus creyentes: Dios crea y perdura; los creyentes erramos y nos degradamos. La Devoción de Jesús, María y José (y la pionera principal) deben ser preservadas de toda mácula producto de nuestras fallas en el cumplimiento y cuidado de la misión y sus intereses: ese, hermanos míos, es mi objetivo.
Lo que queda es seguir cada quien en lo suyo: hasta en la práctica de la Devoción de Jesús, María y José. Cada quien, más tarde o más temprano, responderá por sus frutos.
HERMANOS…
Este Blog, humildemente, está a la orden de La Sociedad (de La Sociedad de Jesús, María y José), para todo lo que pudiera necesitar y querer publicar; obviamente todo concerniente a Jesús, María y José: anécdotas; milagros; festividades; proyectos (si es que llegara a haberlos); invitaciones a eventos serios en honor a Jesús, María y José y/o para gestionar acciones relativas; peregrinaciones; prédicas; etc., etc., etc. También este blog está a la orden para todos los devotos o simpatizantes que, eventualmente, desearan compartir aspectos devocionales pertinentes. Este blog, además de que el medio tecnológico lo exige, es para la humanidad; siempre que impere el amor, la fe y el respeto, está abierto completamente para todos los requerimientos en que sólo devocionalmente puede ser útil.
LA BENDICIÓN DE JESÚS MARÍA Y JOSÉ SEA CON TODOS NOSOTROS.
Jesús, María y José: aléjanos el mal y del mal; protégenos; ilumínanos... a todos. Amén.
| ||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||